Ésta es una historia real: Organización Don Bosco apareció hace 35 años siendo un torneo amateur que contaba solamente con 6 equipos que tenían un interés en común, las ganas de jugar al fútbol.
Rápidamente estos veteranos testarudos, que no querían colgar los botines, se encargaron de difundir el campeonato entre los suyos, se expandieron de una manera impensada y hoy por hoy, el Torneo cuenta con más de 150 equipos inscriptos en sus 5 categorías. Es decir, cerca de 3500 jugadores que aún no pierden esa esencia, esa pasión.
Porque lo que el resto de la gente no entiende es que existe un amor incondicional por la redonda, un sentimiento único que no se puede explicar con palabras, aunque lo intentemos. Es un amor que trasciende cualquier tipo de relaciones, reuniones, eventos y hasta situación económica. Es un amor que solamente comprendemos con el corazón quienes sentimos esto por el fútbol. Y por eso en este torneo los participantes se toman tan enserio los partidos y quieren ganar como sea. Por eso esperan ansiosos al fin de semana, mirando el pronóstico y rezando para que no llueva... Quieren ser titulares, y hasta a veces llegan a discutir, como toda familia. Y eso es lo que realmente son: una gran familia.
Y lo que pretendemos es estrechar los lazos entre los equipos, brindarle todo lo que está a nuestro alcance y acercarles una foto, una nota y una anécdota que pueda compartirse para reír y hasta para que algunos puedan mandarse la parte.
Porque aunque las piernas pesen, la cancha parezca cada vez más grande, duelan las articulaciones y haya que usar ungüentos, vendas, rodilleras o fajas, seguiremos jugando, porque EL AMOR POR EL FÚTBOL NO TIENE FECHA DE VENCIMIENTO.